A Cristina Pedroche le han hecho falta ocho años para desbancar la audiencia que había sido fiel a la cadena más vista. Casi los mismos en los que dicha cadena se llevaba la corona por pegar con silicona a sus espectadores al televisor. La constante que ha mantenido a TVE como reina de las campanadas durante diez años consecutivos terminó siendo desmontada el pasado año 2021 gracias a la expectación que creó Cristina Pedroche con su vestido.
Este año, en un giro de los acontecimientos, La 1 ha sorprendido con la despedida de la eterna Anne Igartiburu tras 17 años al frente de las uvas, sustituida por Los Morancos, asegurando un toque de entretenimiento y diversión, junto a Ana Obregón; mientras que Antena 3 ha vuelto a apostar por juntar el vestido de la Pedroche con Alberto Chicote. Quien se mantiene apartada de la medalla de oro es Telecinco, que desde su tragedia aquel 2002, donde debido a las condiciones climatológicas tuvieron unas uvas a destiempo, no ha levantado cabeza, manteniéndose siempre entre el millón y los 3 millones de espectadores.
Desde 1962 la cadena pública adquirió la herencia de la radio y llevó a los españoles por primera vez las doce uvas con imagen, ya que los inicios de la televisión retransmitían la tradición española con una cámara fija que enfocaba el reloj de la Puerta del Sol mientras un locutor narraba el momento desde Prado del Rey, sin desplazarse al centro de Madrid.
No fue hasta la llegada de los 90 que unos jóvenes Martes y Trece estrenaron un balcón por el que ya han pasado multitud de rostros conocidos.
Eran años de hegemonía de la pública, no existían las privadas, pero la misma década de los 90 trajo consigo la inclusión de estas cadenas al conglomerado audiovisual español. Y también a las Campanadas. «Fue todo un experimento que no sabíamos si iba a funcionar», comenta Juan Manuel Ibáñez, director y realizador en Mediaset, desde Telecinco, quien estuvo aquel primer año.
Sin embargo, desde que existen registros (1992), en el minuto exacto de las campanadas (00:00 h), La 1 ha arrollado totalmente a las privadas. Aunque la aparición de Antena 3 y Telecinco supusiera todo un revulsivo audiovisual, la atracción por aquellas nuevas cadenas desapareció en pocos años. De hecho, el 31 de diciembre de 2001, la cadena pública firmó su mayor cuota de la serie histórica tras alcanzar un share medio del 71,6% con 10.550.000 espectadores. Aquel año, las campanadas de Antena 3 marcaron un 5,3% y las de Telecinco un pírrico 3,1%.
A lo largo de estas dos décadas, las principales cadenas comerciales han logrado despuntar con algunas de sus retransmisiones, pero han sido incapaces de mantener una regularidad en el tiempo. Televisión Española, por su parte, ha logrado mantener siempre más de 20 puntos de diferencia con respecto a la segunda opción, aunque, tal y como puede apreciarse en el gráfico, la curva de La 1 es completamente descendente.
Ni Belén Esteban ni María Patiño pudieron opacar el interés que empezó a sentir la audiencia por Antena 3 a partir del año 2015. Esa curva ascendente corresponde al llamado ‘fenómeno Pedroche’. La presentadora ha logrado convertir las campanadas de Nochevieja en todo un evento, el templo del entretenimiento televisivo, tal y como contó hace días en El Hormiguero.
Fue en 2014 cuando Atresmedia le encargó a Cristina Pedroche la conducción de las campanadas de Nochevieja, junto a Frank Blanco -por aquel entonces presentador de Zapeando-, llegando a alcanzar una audiencia media de 1.395.000 espectadores en el minuto exacto de las campanadas. Un hito que aplastó a Cuatro y que provocó un movimiento insólito hasta la fecha, dado que Antena 3 quedó relegada a la tercera posición (8,5%), por detrás de la cadena verde.
Poco a poco, la vallecana ha ido escalando hasta llegar a pisarle los pies a la audiencia de TVE en el año 2019. Mientras que la cadena pública resultaba con un 35,2% de share y 6.154.000, Antena 3 no se quedaba tan lejos y empezaba a remontar con un 26,5% y 4.634.000 espectadores.
Por lo que ya en pleno 2020, Televisión Española reacciona y coloca, por primera vez, a dos mujeres al frente de la retransmisión. Anne Igartiburu y Ana Obregón fueron las encargadas de despedir el año y dar la bienvenida al 2021. La pública perdió 2,2 puntos y firmó mínimo histórico. Aunque si bien es cierto, justo en el minuto exacto del cambio de año (00:00 a 00:01 horas) TVE reunió una audiencia del 38,7% de cuota y un total de 8.621.000 de espectadores, logrando el mayor seguimiento en el momento de las campanadas de los últimos 10 años, lo que le hizo mantener el liderazgo.
El pasado año, en las uvas de 2021, la cadena había decidido apostar por la misma pareja de presentadoras, sin embargo, el positivo por Covid de Obregón a última hora obligó a TVE a sustituirla por Jacob Petrus, presentador de Aquí la Tierra.
Telecinco, por su parte, sigue descolgada en sus retransmisiones de las Campanadas. El año pasado volvió a firmar una audiencia minoritaria, a pesar de que Paz Padilla y Carlos Sobera fueron protagonistas de todos los canales de Mediaset, excepto de Boing. La pareja firmó un pobre 7.7% y 1.421.000 espectadores, dejándose siete décimas y 43.000 espectadores en un año.
Sólo faltan tres días para saber qué cadena alcanzará el primer puesto en audiencias, si la pública con Los Morancos y Ana Obregón o Antena 3 gracias al presunto body painting de Pedroche y la presentación de Chicote.