El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, se ha apuntado a la rebaja de impuestos, vía deducciones extraordinarias, para las rentas inferiores a los 30.000 euros. A esa deducción sobre IRPF se unen otras a las familias por gastos educativos, por guarderías y por el encarecimiento de los intereses de las hipotecas. Asimismo, inyectarán 40 millones a empresas antes de final de año y 2.100 millones para políticas de empleo entre 2023 y 2025.
Page interviene este martes en el debate del Estado de la región en las cortes castellano-manchegas, donde ha apelado a su independencia al afirmar que «este es un gobierno autónomo de verdad, autónomo de mi partido y tengo claro el encargo de los ciudadanos» en lo que ha sonado a una clara advertencia a Ferraz y a Moncloa.
Se declara «autónomo» de su partido y mantendrá su defensa de la Constitución
«Este es un gobierno firme. Mantiene posiciones firmes en la defensa de la constitución frente a quien sea y cada día lo voy a ser más», ha agregado en una alusión velada a esos socios parlamentarios de Pedro Sánchez, que como ERC y Bildu, considera son un lastre.
Con estas medidas fiscales se llega al 87 por ciento de los contribuyentes. Arguyen en el Gobierno regional que «para esas mismas rentas, si hubiéramos deflactado el IRPF, el ahorro sería de entre 7 y 14 euros. En cambio, con las deducciones el ahorro será de entre 100 y 200 euros».