Un hombre ha presentado una denuncia ante la Policía Nacional después de que un conductor del servicio público de transporte obligara a bajar a su hija de tres años del autobús que conducía por no llevar puesta la mascarilla.
Ambos venían de pasar una tarde navideña en el centro comercial de Nuevo Centro, donde acudieron en un autobús de la EMT. El problema fue a la vuelta, cuando al subirse a otro bus municipal, el conductor le instó que se pusieran la mascarilla.
Según informa la Cadena Ser, el padre accedió a ponerse el cubrebocas pero el conductor exigió «de malas maneras» que su hija también se la pusiera. Una exigencia totalmente innecesaria, pues la normativa sanitaria actual exonera su uso en medios de transporte para menores de seis años.
De acuerdo con el relato del padre, este intentó explicar al conductor que su hija tenía solo tres años. Sin embargo, el autobusero empezó a gritarles y a decirles que la menor podía «infectar al resto» y que no arrancaría hasta que no se bajaran del vehículo.
Después de vivir esta incómoda situación y tras el silencio de los testigos presentes en el autobús, ambos marcharon al día siguiente a presentar la pertinente denuncia en una comisaría de la Policía Nacional, así como una queja al servicio de Atención al Cliente de la EMT, al Ayuntamiento de Valencia y al Defensor del Pueblo. Al respecto, fuentes municipales aseguran que no les haya llegado ningún requerimiento de estas características, pero que revisarán el caso de manera interna.