Marruecos hace historia en Qatar y consigue su clasificación para la semifinal del Mundial después de imponerse a Portugal por 1-0. Hakimi, Ziyech, Amrabat y compañía han escrito una nueva página en la historia del fútbol, ya que se trata del primer equipo africano que llega a la penúltima ronda de un Mundial.
La fórmula del éxito marroquí todos la conocen, pero muy pocos, o nadie, la ejecuta como lo hacen los chicos de Walid Regragui. La estrategia fue la misma que le llevó a liderar un grupo con Croacia y Bélgica y a eliminar a España, aunque esta vez mejorada, ya que Marruecos abrió la lata y no tuvo que esperar hasta los penaltis para decidir su destino.
El cruce con Portugal dejaba a la selección africana como «la víctima». Esto también reforzaba el plan de Regragui, que ha hecho de su equipo un lobo con piel de cordero. Los de Fernando Santos han ido desde el principio a buscar la portería de Bono, pero la disciplina táctica, los infinitos esfuerzos y las continuas ayudas entre los jugadores de Marruecos han impedido que las acometidas portuguesas tuvieran éxito.
Ounahi y Amrabat fueron dos pulpos en el centro del campo, todos los balones acababan en ellos y además de exhuberancia física demostraron que su fútbol es mucho más que piernas. Marruecos aguantó agazapado, un mérito que cuesta más entender en jugadores de calidad como Ziyech, que ha sacrificado su gusto por el esférico por el bien del colectivo. La calidad de Maruecos entró en escena cuando recuperó la pelota y consiguió salir. Cuando lo hizo no solo enseñó los dientes, sino que asestó un mordisco letal.
En el minuto 41 En-Nesyri se elevó al cielo del Al Thumana y se anticipó a Diogo Costa para conseguir un gol histórico: Marruecos logra ser el primer equipo africano que llega a las semifinales de un Mundial.
Portugal se rebeló y comenzó su bombardeo lo antes posible para evitar que su aventura en Qatar muriese en los cuartos de final. Bruno Fernandes sorprendió a Bono con una volea escorada de vaselina, pero su intento se estrelló con el travesaño. A los 5 minutos del descanso Fernando Santos puso más dinamita para cambiar la inercia loa antes posible: Cristiano Ronaldo y Cancelo al campo.
Como ha sucedido en todo el Mundial, Marruecos no evidenció grietas en su bloque por mucho que Portugal tratara de colarse por alguna rendija con un cabezazo de Gonçalo Ramos que se marchó fuera y con varias paradas salvadoras de Bono a Joao Félix y Cristiano Ronaldo. Cuando el partido agonizaba y Marruecos estaba a punto de llegar al objetivo Pepe desperdició la ocasión más clara y cabeceó fuera. La derrota de Portugal no solo acaba con su sueño mundialista, sino que ha significado la última participación de Cristiano Ronaldo en un Mundial.
El tanto de En-Nesyri ya es historia de los mundiales. El remate del jugador del Sevilla FC siempre se recordará como el gol que clasificó por primera vez a una selección africana a la semifinal del torneo más grande del fútbol internacional. Marruecos luchará por un puesto en la final del Mundial de Qatar con el ganador del cruce entre Inglaterra y Francia.