Con la inflación disparada es el momento de mover el dinero para no perder poder adquisitivo. Hay varias opciones y aunque no todas baten a la inflación, hay muchas que pueden dar una rentabilidad aceptable. Este año, las letras y bonos del Tesoro son las que están desatando el furor entre los inversores minoristas. Por ejemplo, las letras desde 3 a 12 meses están dando una rentabilidad del 3%. Este porcentaje llevó a miles de personas a hacer filas en las puertas del Banco de España y a que el interés en las entidades financieras creciera. Sin embargo, hay que tener en cuenta que para invertir en estos productos se cobra una serie de comisiones.
Hay varias opciones para comprar letras y bonos del Tesoro. Una de ellas es a través del Banco de España, acudiendo a su oficina principal o las delegaciones de las provincias, con cita previa (desde el pasado mes de febrero). También se puede hacer directamente desde la web del Tesoro. En ambos casos, la comisión que debe pagar el inversor es de 1,5 por mil, con un mínimo de 0,9 euros y un máximo de 200 euros. Es decir, la inversión mínima de las letras que es de 1.000 euros (una letra) tiene una comisión de 1,5 euros. Si el inversor quiere invertir 10.000 euros, la comisión que pagará será de 15 euros.
De esta manera, la rentabilidad ya no es la marcada sino que habría que restarle esa comisión. En la última subasta de letras a 12 meses, la rentabilidad fue del 3,335%, con que un minorista que invirtió 1.000 euros ha conseguido 32,24 euros según los cálculos de la web del Tesoro, pero a esa cantidad hay que restarle la comisión de 1,5 euros, por lo que la ganancia ha sido de 30,74 euros, lo que supone una caída del 6,63%.
Si el inversor minorista quiere comprar letras y bonos del tesoro a través de su entidad financiera también puede hacerlo. No obstante, la comisión que cobran los bancos es mayor que la de los organismos públicos. Cada entidad tiene su propia tarifa y dependerá de cómo se invierta y de cuánto dinero.
Banco Santander tiene un margen aplicado del 0,20% con base anual sobre el nominal contratado. Por ejemplo, invertir una letra con vencimiento a un año tendría una comisión del 0,2% y si es una a 6 meses del 0,10%. Así, si el minorista invierte 1.000 euros en una letra a 1 año con la rentabilidad del 3,335% la ganancia sería de 30,24 euros, ya que a los 32,24 euros de rentabilidad se le restaría 2 euros de la comisión, una caída del 6,2%.
En el caso de Bankinter, la compra de letras a través de una oficina de la entidad puede tener una comisión de hasta el 0,3%, aunque todo depende del importe. Así, si el minorista invierte 1.000 euros en una letra a 1 año con la rentabilidad del 3,335% la ganancia sería de 29,24 euros, ya que a los 32,24 euros de rentabilidad se le restaría 3 euros de la comisión, una caída del 9,3%.
Más allá de invertir directamente en las letras del Tesoro, se puede hacer mediante fondos de renta fija o fondos monetarios. No obstante, estos productos financieros también tienen comisión, por lo que a la rentabilidad que te den también hay que restarle la comisión. En este caso son las comisiones de gestión y depósito, que cobran la gestora y el depositario, respectivamente. Estas comisiones son implícitas, es decir, ya están deducidas del valor liquidativo del fondo, puesto que se cargan directamente al fondo de inversión.
El segundo tipo de comisión son las de suscripción y reembolso: pueden ser a favor de la gestora o del propio fondo (en este caso se denomina descuento a favor del fondo). Son explícitas, es decir, se cargan al partícipe en el momento en que se realiza la suscripción o el reembolso, como un porcentaje del importe suscrito o reembolsado y deduciéndose de este. Además, es posible que se cobren comisiones por cambiar la inversión de un compartimento a otro, dentro del mismo fondo.
Las comisiones de los fondos también varían según la entidad o la gestora. Según un estudio de ESMA (la Autoridad Europea de Valores y Mercados por sus siglas en inglés), el coste medio de los nuevos fondos se ha reducido un tercio de 2012 a 2021, al pasar del 1,55% anual al 1,1% de media.
Rodrigo Buenaventura, presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, ha puesto el foco en la renta fija, bonos y letras, por su creciente comercialización. Buenaventura ha recordado esta semana que es “especialmente importante que el cliente reciba la información del riesgo que está asociado a este tipo de productos”. El presidente del supervisor ha insistido en que hay que trasladar a los inversores minoristas el mensaje de que invertir en renta fija también tiene riesgos.
“Hay que decirles que valoren los riesgos si suben más los tipos, que sean conscientes de la rentabilidad real descontada la inflación y seguramente negativa que ofrecen los productos en cada momento. Y Tres: infórmese de las posibilidades de retirar sus inversiones antes de tiempo y las consecuencias para usted de esa retirada”, ha explicado Rodrigo Buenaventura.