Los siete Oscar a ‘Todo a la vez en todas partes’ es el mensaje de auxilio, o grito de alivio, de una industria harta de verse dividida entre el negocio inane que propone Marvel y el arte en permanente bancarrota del cine independiente.
De los 100 millones de dlares que Todo a la vez en todas partes ha recaudado en las salas de cine de todo el mundo desde su estreno hasta ahora mismo, la contribucin espaola es de poco ms de medio milln. Es decir, un triste 0,5%. No es mucho. En el ao de su estreno, el 2022, la pelcula de los Daniels (Daniel Kwan y Daniel Scheinert) que acaba de ser coronada con todos los honores como la mejor produccin de la que ha sido capaz Hollywood segn la experta opinin del propio Hollywood acab en el puesto 88 de Espaa. No es muy alto. Para hacerse una idea: dos casillas por debajo de Reyes contra Santa. De otro modo, lo que ocurre all nada tiene que ver con lo que sucede ac y el revuelo que ahora mismo cunde en las oficinas de Los ngeles no es tan ajeno como la posibilidad de ver nuestros dedos convertidos en salchichas.
Qu est pasando que no nos estamos enterando?, sera la pregunta. Cuando en la noche del domingo, ya al lmite de la ltima campanada, Michelle Yeoh derrot a la favorita Cate Blanchett en la categora de actriz principal se perfilaba definitivamente el que la industria del cine quiere que sea el nuevo paradigma despus de la pandemia. Previamente, al principio de la gala, era Jamie Lee Curtis quien se merendaba a la otra favorita: Angela Bassett.
Y, entre medias, la pareja de directores acababa con nada ms y nada menos que el nico en ser nominado ininterrumpidamente cada dcada desde los aos 70: Steven Spielberg. Terminaban con l., y con Martin McDonagh, y con Todd Field, y con Ruben stlund. Es decir, por orden, a los pies de la comedia de los multiversos, llammosla as, cayeron: a) el cine ms declaradamente de autor vestido con los ropajes del prestigio tan querido en los festivales (eso es Tr); b) el nico gnero, el de superhroes, capaz de llevar en masa al cine a la gente de menos de 30 aos (eso es Wakanda forever y todo Marvel en general); c) el ms reputado representante de la ms brillante generacin que ha dado Hollywood (se es Steven), y d) cualquier autor europeo que presuma de cultivado u original (sos son McDonagh y stlund).
En los ltimos aos, los habitantes de Los ngeles y alrededores han vivido con el corazn dividido entre lo que les aportaba dinero y poder, y lo que les ha procurado ese otro tipo de poder que tiene que ver con la relevancia ideolgica y cultural. Y cada vez que llegaban los Oscar le daban las gracias a Disney y Marvel, pero las estatuillas se las llevaban CODA, Nomadland o Parsitos, por citar los ltimos. En una reciente entrevista, el productor de Todo a la vez en todas partes, Jonathan Wang, haca esta reflexin con la voz lo suficientemente alta para que lo recogiera la grabadora: Se insiste en ver a Top Gun como la pelcula que llev a la gente al cine tras la pandemia. Y es cierto. Pero Cruise lo que hizo fue recuperar intacto un modelo antiguo que volva a funcionar como lo haba hecho siempre. Pero las cosas ya no son como antes. Pausa. Nuestra pelcula, en cambio, trajo a las salas a un nuevo tipo de pblico que ya haba dejado de ir al cine. Tengo la sensacin de que lo que hemos hecho es crear una nueva rama en el multiverso en la que el cine independiente puede continuar siendo muy emocionante. Y aqu, en efecto, la clave. De alguna manera, la agenda que marcaban los festivales (con lugar de excepcin en Estados Unidos ltimamente para Sundance) nada tena que ver con la de los distribuidores.
Hollywood, si es que se puede hablar de l como entidad autnoma y homognea, est convencido de haber encontrado la frmula capaz de cuadrar el crculo: un cine imaginativo que no renuncia a mantener intactos los sagrados principios de la produccin indie (a poco que se mire de cerca, la creacin de los Daniels no deja de vender, detrs de sus descerebrados fuegos artificiales, lo de siempre: reconciliacin familiar, inclusividad y los puntos centrales de la agenda 2030 que tanto disgusta a David Mamet) combinado con el chauchau de los multiversos de los superhroes sazonados con un humor inmediato ms propio del planeta TikTok. No est claro que haya nacido un nuevo paradigma, pero s parece evidente que se es el deseo muy mal disimulado de una industria que por primera vez en muchsimo tiempo ha conseguido ahogar en premios Oscar a una pelcula que ha visto la gente y que no es necesario explicar de qu va.
Si se quiere, la solucin tambin es un poco el problema. Daniel Kwan y Daniel Scheinert, que han pasado del cero al infinito en un noche, no dejan de ser unos tipos muy particulares que si de algo huyen es precisamente de normas. Buena parte del encuentro con la prensa apenas logrado el Oscar a mejor guion se fue en explicar su catico mtodo de trabajo que poco o nada tiene que ver con los esquemas de la industria que ahora les agasaja. Schneidert, un paso ms all, explic como l y los suyos aprendieron a manejar el programa para los efectos especiales sobre la marcha. Todo a la vez en todas partes ha funcionado, y no de forma homognea en todo el mundo, pero sus trabajos anteriores no pasaron de ser dos excentricidades geniales para ser consumidas a sorbos.
Por el otro lado, el otro movimiento interesante de la jornada del domingo se vivi en el auge recuperado del siempre vapuleado Netflix, como santo y sea de las plataformas vivas. Hasta la fecha, cada proyecto de la N mayscula se haba saldado con un veto. Ni El poder del perro, ni Mank, ni El irlands, ni Roma lograron su propsito. Sin no vedad en el frente, en puridad, tampoco. Pero sus cuatro estatuillas han dado con una nueva llave: la de la deslocalizacin. La produccin alemana de un debutante como Edward Berger tambin esconde un mensaje oculto: basta de directores del establishment.
Sea como sea, y a la espera de lo que pase, la solucin ahora mismo parece estar en un nuevo lugar. O en todas partes. Menos en Espaa, eso s.
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