“Hay aviones del ejrcito espaol preposicionados para el momento en que se den las condiciones”, asegura el ministro de Exteriores
El ministro espaol de Exteriores, Jos Manuel Albares, afirm este viernes en Berln que est “todo listo” para la evacuacin de unos 60 espaoles desde Sudn, aunque reconoci que de momento no se dan las condiciones para que puedan aterrizar aviones para esa repatriacin. En la misma situacin se encuentran otros pases europeos, incluida Alemania. La urgencia por sacar del pas a sus nacionales ha obligado al ministro alemn de Defensa, Boris Pistorius, a cancelar el viaje que tena previsto realizar este domingo a Estados Unidos.
“Lo tenemos todo listo, hay aviones del ejrcito espaol preposicionados para el momento en que se den las condiciones, pero ahora desgraciadamente no se dan para que puedan aterrizar y puedan trasladar a 60 espaoles y a 20 de otras nacionalidades”, declar Albares en una comparecencia conjunta en Berln con la ministra alemana de Exteriores, Annalena Baerbock.
“Hemos entrado en contacto con todos los espaoles”, afirm el ministro, que no obstante hizo un llamamiento a que si hay alguno que no haya sido contactado se ponga en comunicacin con el telfono de emergencia consular y record que las condiciones en el pas son “muy difciles de combate intenso”.
Violentos combates
Los intentos por repatriar a los ciudadanos extranjeros de Sudn han fracasado hasta el momento ante la violencia de los combates en torno a los aeropuertos. El mircoles, Alemania intent una evacuacin con aviones de las Fuerzas Areas, pero la situacin en la asediada capital sudanesa de Jartum era demasiado peligrosa para tal misin. “La Bundeswehr est preparando opciones para la repatriacin de alemanes y otras personas que deben ser protegidas de Sudn”, dijo un portavoz del Ministerio de Defensa.
Otros pases, como Japn, Estados Unidos ya han movilizado a sus tropas preparndolas para evacuar a su personal.
En el caso de Espaa, entre tanto, ya est en marcha el reagrupamiento de los espaoles en la Embajada, que ha conseguido avituallarse en las ltimas horas, al igual que la residencia del embajador, y reforzar la seguridad en torno a ellas. “Las condiciones son difciles”, dijo Albares. Los combates continan y el aeropuerto de Jartum est cerrado.
“En cuanto tengamos oportunidad nuestros aviones militares entrarn en Sudn y evacuarn a nuestra colonia”, agreg el ministro, que ha informado que de hecho un espaol que estaba a bordo de un barco frente a las costas de Sudn ya ha conseguido ser evacuado hacia otro pas.
Albares subray que que la “violencia completamente estril” que comenz el sbado pasado “tiene que cesar”, un mensaje que tambin ha repetido Baerbock. “La situacin es dramtica y en la prctica la poblacin est atrapada desde que estallaron los combates. Cruzar la puerta supone un riesgo de muerte”, lament la ministra.
“Exigimos a los dos generales responsables que acaben con la violencia sin sentido, cesen el fuego, permitan las evacuaciones y que la poblacin reciba la ayuda humanitaria que necesita”, reclam Baerbock dirigindose al jefe del Ejrcito, Abdelfat al Burhan, y
al comandante de las RSF, Mohamed Hamdan Dagalo, alias Hemedti.
En este sentido, ha animado a ambos a resolver el conflicto mediante la negociacin “en lugar de reducir Sudn a escombros”. La ministra alemana, al igual que Albares, respald los esfuerzos de mediacin que estn realizando distintos actores, como la Unin Africana, la IGAD o la ONU con vistas a lograr un alto el fuego de 72 horas con motivo del final del Ramadn este fin de semana.
Los enfrentamientos estallaron hace seis das en medio de conversaciones sobre una reforma del ejrcito y la integracin del grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rpido (FAR) en el mismo, dentro de un proceso poltico para devolver a Sudn a la senda democrtica tras el golpe de Estado de 2021 perpetrado por el jefe del ejrcito, Abdelfatah al Burhan, y el comandante paramilitar y lder de las FAR, Mohamed Hamdan Dagalo.
Al menos 413 personas han muerto y 3.551 han resultado heridas en Sudn desde el estallido del conflicto entre el ejrcito de ese pas y las FAR, segn el ltimo recuento de la OMS.
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