Ciudadanos dará otro paso más tras la refundación y abandonará su sede nacional frente a las Ventas en Madrid a finales de verano, y con septiembre como fecha límite. La mudanza se producirá después de ocho años de trayectoria en el ‘coloso’ que preside la entrada a la calle Alcalá, con los liderazgos intermedios de Albert Rivera, primero y desde el salto a la política nacional desde Cataluña, e Inés Arrimadas después. Ella, ahora exclusivamente como portavoz del Congreso de los Diputados. La actual dirección nacional, electa a principios de enero con Patricia Guasp como portavoz política y Adrián Vázquez como secretario general a la cabeza, ha tomado la decisión de abandonar las cinco plantas que están ocupando. Por una razón estratégica, pero igualmente por cuestiones económicas.
A nivel de acción política, el partido quiere estar en un entorno más céntrico y mejor comunicado del que ya ofrece el propio enclave de las Ventas. Por otro lado, la motivación económica es la que más peso ha tenido para tomar esta decisión. Más cuando las previsiones de representación de cara a los comicios de mayo, en poco más de un mes, no auguran un buen resultado a los naranjas. Ni si quiera el mantenimiento en los doce parlamentos que se exponen a renovación. Solo lugares de peso como en el Ayuntamiento de Madrid, con Begoña Villacís como candidata, prevén conseguir un par de escaños. Allí los liberales esperan ser determinantes para el PP de José Luis Martínez-Almeida.
El estado de las cuentas ya preocupaba en la presidencia de Arrimadas, que bajo estas previsiones electorales y la necesidad de garantizar un equilibrio entre gastos e ingresos ya acordó con los suyos abandonar la sede nacional al término del contrato y abrirse a una nueva instalación. El gasto mensual destinado en las cuentas del partido es de aproximadamente 35.000 euros para los 2.500 metros cuadrados. El global de las arcas del partido es de once millones de euros, tal y como se trasladó de manera interna en la primera jornada de la VI Asamblea General en las instalaciones de La Nube de Pastrana. No obstante, fuentes de la formación rebajan a en torno a entre cinco u nueve millones la cifra. Algo que, progresivamente, y si la tendencia no mejora después de las generales irá a la merma al no percibir, entre otros, primas por representación parlamentaria.
Frente a las informaciones de la última semana, fuentes del sector inmobiliario pusieron en conocimiento a El Independiente, a principios de diciembre, sobre el interés de los de Arrimadas de cambiar de centro de operaciones de cara a las próximas fechas. La dirección de Ciudadanos, según trasladaron y hoy recalcan esas fuentes, no estaba dispuesta a seguir en Ventas por el alto coste que ello suponía, por lo que dejó en manos de profesionales inmobiliarios la búsqueda de un nuevo destino acorde con las posibilidades monetarias de la formación. En octubre se planteó la idea de manera interna, a lo que siguió el contacto con el sector para dar el paso. Preguntado por ello, entonces, fuentes de la primera línea del partido afirmaron desconocerlo o no estar al tanto. Incluido el entorno de la propia Arrimadas y el entonces vicesecretario Edmundo Bal.
Arrimadas dejó claro en octubre que el partido no podía seguir afrontando el alto coste de la sede central de Ciudadanos»
Las primarias protagonizadas por ambos ambos dirigentes naranjas, la primera como propulsora de la lista ganadora y continuista de su labor, y Bal como candidato alternativo con una propuesta de corte más progresista, independientemente de la victoria de uno u otro, deberían de desarrollar la línea ya impulsada por la ex dirección. Así lo han hecho Guasp y Vázquez, materializando lo acordado sobre el papel. Todo, en beneficio de que las cuentas cuadren y estén saneadas. Voces críticas con la dirección e integradas en el Consejo General, el máximo órgano entre asambleas, vienen poniendo en tela de juicio ciertas «actuaciones» económicas del partido como la celebración de la última reunión del Consejo en Granada a finales de marzo, que supuso, según las mismas, un gasto elevado en desplazamientos y dietas que no debería asumirse «en estas condiciones».
Recorte de listas electorales
El número de listas electorales que Ciudadanos también presentará a las elecciones del 28-M se verá, igualmente, reducida tras las salidas de distintos miembros a nivel territorial o la incapacidad de encontrar candidatos o cimentar una propuesta. Se pasará de unas 2.000 en la anterior convocatoria de mayo de 2019 a cerca de 800 listas municipales y regionales y 15.000 aspirantes a elegibles. Cuenta de ello la ha dado el secretario general Vázquez en la comparecencia ante los medios de este lunes, de manera posterior a la reunión del Comité Permanente.
CS presentará 800 listas electorales, lo que los sitúa en el momento de expansión del partido con Rivera al frente»
Estos números, retornan al partido al estadio del 2015, tras producirse el salto político nacional. Y las zonas donde será más complicado contar con papeleta de Ciudadanos serán Galicia y País Vasco, donde la representación de los liberales es muy pequeña. Sí hay buenas previsiones para Baleares, la Región de Murcia, la Comunidad Valenciana y Aragón, así como en Valencia y Alicante, Ciudad Real y el Madrid de Villacís.
Precisamente por haber alcanzado, como mínimo, los niveles de los de Rivera en 2015 y por estar, dicen, en un proceso similar al de entonces de construcción y promoción, Vázquez y la dirección nacional afirman estar satisfechos y ven el «objetivo más que cumplido». El partido no quiere plegarse «ni a izquierda ni a derecha», por lo que, de haber posibilidad de acuerdo para un gobierno de coalición, cualquier decisión irá en base a su programa. Se establece, eso sí, una diferencia en aquellas negociaciones posibles para garantizar la gobernabilidad.
En ellas, partidos tildados de «populistas» no estarían vetados y podrían ser sujeto de acuerdo colectivo. Ciudadanos insiste en que quiere ser decisivo y presentarse como una herramienta útil para los jóvenes, las clases medias y las familias, y lamentan que las referencias a su actuación queden mermadas por noticias negativas como la salida de cargos que buscan refugio en el PP.