El Corte Inglés prevé reducir el número de trabajadores dedicados a los servicios administrativos centrales y regionales, para lo que les ofrecerá pasarse a las tiendas o, en el caso de los mayores de 59 años, bajas incentivadas.
Así se lo ha notificado hoy el grupo a los sindicatos, a los que ha detallado su intención de «reordenar» la plantilla de sus servicios centrales para reforzar las tiendas, y con los que quiere pactar el número de trabajadores afectados y las condiciones.
En un comunicado difundido este viernes, detalla que el objetivo de esta medida es «reforzar las tiendas, atender la buena evolución de las ventas y mejorar la atención y el servicio al cliente», y responde a la «modernización de los procesos y los sistemas que ha implementado la empresa en los últimos meses».