El Gobierno ha arrancado de Bruselas la prórroga del mecanismo ibérico hasta finales de este año. Así, España y Portugal podrán limitar el precio del gas que se utiliza para impedir que el coste del megavatio del gas se contamine en el mercado eléctrico.
Dicho tope, por otra parte, se elevará más de los 48 euros el Mwh hora a lo largo de todo este año, desde los 55 euros que se pagan este mes hasta terminar en diciembre con el límite en 65 euros. La ministra de Transición Energética sostuvo, una vez que se aprobó el documento en Bruselas que la herramienta seguirá protegiendo a “los consumidores españoles y portugueses hasta fin de año” y que “probablemente no se active” si el gas natural se mantiene en los “precios actuales”, pero que volvería a entrar en acción “si vuelve a subir”.
Las palabras de la ministra, por otra parte, son todo un hito. Hace pocos meses nadie pronosticaba que el coste del megavatio a la hora en el gas iba a estar en los dígitos en los que se mueven. En concreto, el MWh que se cifra en el Mibgas, mercado mayorista nacional de gas, es de unos 40 euros. Unas cifras que van a la par en las últimas semanas. Esto viene a decir, que el mecanismo ibérico no se activa puesto que no pasa el umbral fijado por el real decreto.
En la actualidad el mecanismo se activa en la tecnología de los ciclos combinados que generan electricidad con gas pueden ofertar en el mercado diario está fijado por el mecanismo en 45 euros el MWh. Eso significa que el resto de energías ( nuclear, hidráulica, fotovoltaica, eólica…) no pueden cobrar por encima de ese precio.
Según las estimaciones del Ministerio de Transición Energética, desde que entró en vigor el 15 de junio de 2022, ha proporcionado un ahorro superior a los 5.000 millones de euros a todos los consumidores. Fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, eso sí, detallan que la aplicación del mecanismo ibérico que aprobó la Comisión Europea tras la petición de España y de Portugal es una «solución temporal, coyuntural, derivada de la guerra de Ucrania y justificada por la falta de interconexión de la Península Ibérica con el resto de la UE».
Precisamente, la temporalidad de la medida es algo que preocupa a las diversas fuentes del sector consultadas a este periódico. Porque el precio del gas, debido a que gran parte de la demanda de las reservas están cubiertas en Europa (los últimos datos indican que tienen un llenado del 80%), permanecerá a la baja y es previsible que la activación del mecanismo se active menos de lo esperado.
Otra cosa es lo que pueda pasar durante los dos próximos inviernos. El presidente de Naturgy, Francisco Reynés, avanzó este lunes que el verdadero problema llegará en los meses más duros de 2024 y 2025 climatológicamente hablando. Nuestro trabajo es hacer que esta volatilidad de precios se traduzca en menor volatilidad de resultados». “Quedan dos años más de incertidumbre de precio”, se lamentó.
China es una de las principales culpables de la posible subida de precios que se vaticinan en el mercado. El gigante está dejando atrás la utilización de carbón y necesita de una materia prima alternativa para salir adelante. Y esa es, precisamente, el gas natural. El gigante asiático es el segundo mercado más importante importador, solo por detrás de toda la Unión Europea, con un 13% del peso mundial.
De acuerdo a las últimas cifras oficiales, China ha pasado de consumir 4.480 Twh a principios de los 2000 hasta los 14.325 Twh a la hora en 2021, triplicando el consumo en apenas 20 años.
Cabe recordar que España, en un primer momento, quería extender el tope al gas hasta 2024 consciente de que el mercado iba a sufrir vaivenes a largo plazo. No obstante, la Comisión Europea tumbó la propuesta y decidió no prorrogarla hasta la fecha pretendida por el Ministerio de Transición Energética.