Cinco minutos han bastado a Francia para solucionar su debut en Qatar frente a Australia. El conjunto galo sofocó el impetuoso inicio australiano con dos goles prácticamente seguidos que mataron el partido en la primera parte. La selección francesa ha sido clara dominadora durante todo el encuentro, aunque la intensidad de Australia consiguió camuflar sus carencias técnicas durante los primeros 25 minutos, en los que incluso llegó a adelantarse en el marcador. Sin embargo, Francia ha hecho valer su superioridad y tras ponerse en ventaja ha jugado a placer para redondear su victoria en una segunda mitad sin historia, en la que ha ampliado su ventaja hasta el 4-1 final.
El comienzo de la defensa del trono mundial de Francia arrancó con cierto sobresalto. Tan solo 9 minutos pasaban del pitido inicial cuando Goodwin cargaba el segundo palo y anotaba gracias a un gran pase de Matthew Leckie. La acción tenía doble castigo, ya que además de la desventaja en el conteo provocó la lesión de Lucas Hernández, una de las referencias de la defensa francesa.
Australia plantó cara a Francia durante el primer cuarto de partido gracias a su dominio en los duelos, sin embargo un centro excelente de Theo Hernández dejó a Rabiot con todo a favor para cabecear a placer y poner el empate. Los llamados a ser subalternos Theo y Rabiot, el primero que sustituido a su hermano por lesión y el segundo es titular por las bajas de Pogba y Kanté para Qatar- lograban sacar a Francia del apuro en el que se podría convertir el estreno.
La diferencia de nivel entre franceses y australianos se hizó más palpable después del empate y el 2-1 no tardó en caer. Como los grandes boxeadores, Francia reaccionó tras el primer golpe y descosió el entramado de Australia. Un robo y asistencia de Rabiot habilitaron a Giroud, que sólo tuvo que empujar el balón para hacer algo que no hizó en Rusia cuando vencieron el Mundial: marcar un gol.
Con la baja de Benzema, Mbappé hizo valer su condición de estrella y puso su firma en el marcador. Tan solo tres minutos después, el delantero del PSG sirvió un centro de zurda remachado por Giroud para poner el 4-1 definitivo, sumar su segundo tanto en Qatar e igualar a Henry como máximo goleador de la selección francesa.