Pedro Sánchez ha defendido el papel del Gobierno en la solución del conflicto catalán, este domingo en un acto en la Fundación Pasqual Maragall de Barcelona. El presidente del Ejecutivo ha sacado pecho por las últimas reformas que quiere introducir, como la de sedición o malversación, afirmando que «los socialistas, y el PSC en primer plano, trabajamos duro por la convivencia y la concordia». Según Sánchez, su gobierno apuesta por el reencuentro «para garantizar que Cataluña y España nunca más volverán a vivir aquellos días tristes de 2017».
El presidente ha hecho hincapié en que «España avanza». Ha asegurado que a pesar de las dificultades, España es el país que más crece, con menor inflación y con la mejor tasa de empleo de los últimos 15 años. Al mismo tiempo, Sánchez ha apuntado hacia la oposición, criticando a los que comparan su gobierno con una dictadura, calificándolo de «inocentadas, para el 28 de diciembre».
En su intervención, ha recalcado la labor de rescate que los socialistas han llevado a cabo en Cataluña para evitar conflicto y devolver a la convivencia. «Que las disputas se resuelvan en el terreno de la política y no en los juzgados», ha defendido al mismo tiempo que ha reivindicado la figura de Salvador Illa, como la apuesta por el reencuentro y la concordia entre los catalanes.