El casco del granelero OS 35, en la zona del Levante, se ha roto, según ha informado este miércoles el Gobierno de Gibraltar, que ha señalado a su vez que «había un claro riesgo de que esto ocurriera» y declarando que no se ha producido «ningún derrame de petróleo«. Todas las personas a bordo, un total de 24 tripulantes y 6 inspectores que estaban a bordo en ese momento, han sido evacuadas de forma segura, ha destacado.
Por este motivo, se estaba intentando «urgentemente» extraer el combustible del buque, pero todavía no ha sido posible. La Capitanía Marítima de Gibraltar está tomando medidas para garantizar que «se minimice cualquier impacto medioambiental».
El OS 35 ha sido rodeado por una barrera oceánica que debería contener cualquier derrame de petróleo que pueda producirse, aunque desde el Gobierno de Gibraltar han declarado que «no parece que se haya producido ningún derrame de petróleo».
La Autoridad Portuaria de Gibraltar está trabajando con los propietarios, los rescatadores y los aseguradores de P&I Club para resolver todos los problemas que puedan surgir por el momento. Las operaciones en el Puerto de Gibraltar están actualmente suspendidas para concentrar todos los recursos en esta emergencia, ha concluido el Gobierno de Gibraltar.