Dos presas internas de la cárcel de Brieva (Ávila) han agredido y causado heridas este viernes a cuatro funcionarios del centro.
La Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) ha denunciado el ataque sufrido por los cuatro funcionarios del centro penitenciario de Brieva -una mujer y tres hombres- por parte de dos internas de esta cárcel de mujeres situada a unos 5 kilómetros de la capital abulense, informa Efe.
Este sindicato ha expresado en una nota de prensa su «apoyo» a los funcionarios agredidos en torno a las 15.00 horas de este viernes, al tiempo que ha recordado que «este tipo de episodios violentos se viven con frecuencia» y que «no existen protocolos efectivos ante estas situaciones».
Según CSIF, en torno a esa hora dos internas han agredido a una funcionaria y tres funcionarios que posteriormente se han trasladado hasta las urgencias hospitalarias del Complejo Asistencial de Ávila.
El parte de lesiones señala que la funcionaria tiene «lesiones en muñecas y contusiones en la espalda», mientras que de los otros tres funcionarios, uno tiene heridas en un brazo, otro sufre un esguince de tobillo y el tercero cuenta con una herida abierta en una pierna.
La Central Sindical Independiente de Funcionarios ha destacado la «rápida y eficaz» actuación de los funcionarios, que ha podido evitar que «se produjeran daños personales de mayor gravedad».
Inseguridad en las prisiones
Tras estos hechos, CSIF denuncia que «el grado de inseguridad en las prisiones es ya es inaceptable» y que los empleados públicos de las prisiones de Castilla y León «viven una situación de urgencia, por el déficit de personal, el envejecimiento de las plantillas y la falta de recursos».
En este sentido, CSIF hace referencia a los datos oficiales del Portal de la Transparencia, según los cuales las plantillas tienen un déficit de 4.173 empleados y su seguridad «está en juego» -28.160 plazas en total y 23.987 puestos ocupados-.
Tras destacar que en Castilla y León las plazas vacantes rondan las 700, este sindicato considera que existe un dato «aún más alarmante», en referencia al envejecimiento que se ha producido en las plantillas desde 2002, con una edad media de 55 años.
En este sentido, CSIF pide que «se reconozca cuanto antes» la figura de agente de autoridad para los funcionarios de prisiones, que «ayudará a que se eviten este tipo de agresiones, junto con el reforzamiento de plantillas y de las mejoras de las condiciones laborales».