La lluvia de misiles rusos sobre Ucrania, como represalia tras la pérdida de Jersón, puede suponer un grave error de cálculo para Rusia. Según fuentes de la inteligencia norteamericana citadas por The Guardian, al menos dos misiles rusos han caído dentro del territorio de Polonia, matando a dos personas en la localidad rural de Przewodów, que se ubica a unos 10 kilómetros de la frontera ucraniana y pertenece al municipio de Lublin.
Estas dos personas, según informa la prensa polaca, han muerto al explotar un tractor en el que se encontraban en ese momento, y presuntamente a consecuencia del impacto de los misiles «perdidos» lanzados desde el lado ruso.
El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, ha reunido de urgencia al Comité del Consejo de Ministros para Asuntos de Seguridad Nacional y Defensa. Se trata de una situación inédita hasta el momento desde el inicio de la invasión de Ucrania por parte de Moscú el pasado 24 de febrero.
El impacto de misiles en territorio polaco afectaría de lleno a un país miembro de la OTAN, y uno de los más comprometidos desde el primer momento en la ayuda militar a Ucrania.
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