La exsecretaria de Estado de Hacienda y también presidenta de la Agencia Tributaria Inés Bardón es ahora la presidenta de la empresa pública SEGIPSA, encargada de la gestión del patrimonio público. Bardón dimitió de su cargo en Hacienda el pasado enero aludiendo «motivos personales» tras tres años y medio en dicho puesto.
La renuncia fue entonces muy sonada por dos motivos. Por un lado, porque se produjo en medio de un aluvión de dimisiones en los ministerios económicos, y por otro, porque Bardón era la máxima responsable de la reforma fiscal, y dejó el puesto a poco más de un mes de que el comité de expertos que ella designó presentase el resultado de su trabajo.
Según explicó entonces el Ministerio, abandonó el cargo por «petición propia» y alegando que lo hacía «estrictamente por motivos personales». También alegaron que se marchaba «a su casa», para reforzar que no había sido contratada por ninguna compañía. Entonces no explicaron a dónde se iba, ni que entraría a formar parte de la citada empresa pública.
Sustituyó al alto cargo que la sustituyó a ella
Tampoco se dio a conocer unas semanas después que en febrero se incorporó como presidenta de la Sociedad Mercantil Estatal de Gestión Inmobiliaria del Patrimonio (SEGIPSA), que depende de la Dirección General de Patrimonio, en el Ministerio de Hacienda. Ella sustituyó en dicho cargo a Héctor Izquierdo y él pasó a sustituirla a ella como secretario de Estado de Hacienda y presidente de la AEAT.
Izquierdo, sin embargo, duró tan solo unos meses en dicha secretaría de Estado puesto que en julio fue nombrado Comisionado especial para la Reconstrucción de la isla de La Palma. A él lo reemplazó Jesús Gascón, actual secretario de Estado de Hacienda y mano derecha de María Jesús Montero.
Bardón es una funcionaria y economista sevillana. Fue nombrada secretaria de Estado en junio de 2018, cuando empezó la legislatura Pedro Sánchez. Hasta entonces era secretaria general de Finanzas y Sostenibilidad de la Consejería de Hacienda y Administración Pública de la Junta de Andalucía, desde 2015, donde acompañaba a María Jesús Montero, entonces consejera de Hacienda y Administraciones Públicas en Andalucía.
Una oleada de dimisiones
Su dimisión se produjo pocos meses después de una cascada de renuncias en el Ministerio de Asuntos Económicos, como la de la secretaria de Estado de Economía, Ana de la Cueva, algo que el departamento de Calviño justificó alegando las horas y meses de trabajo que ha conllevado la pandemia y en especial el Plan de Recuperación. Pero poco antes también abandonó el Ministerio la jefa de gabinete de Calviño desde que asumió el Ministerio, Carmen Balsa, y la directora general de telecomunicaciones Maite Arcos.
Y en Moncloa también se produjeron sonadas salidas ligadas a la economía: Víctor Echevarría, jefe de la Unidad de Políticas Macroeconómicas y Financieras, perteneciente a la Secretaría General de Asuntos Económicos de Presidencia del Gobierno dejó su puesto y su antecesor, Daniel Fuentes, que formaba parte de la Secretaría de Estado de Comunicación, también se despidió. De nuevo en Economía, en verano salió el director general de Digitalización Ángel Luis Sánchez Aristi, así como el entonces director de comunicación del Ministerio, Juan Emilio Maíllo.
Gana más en SEGIPSA que como secretaria de Estado
Bardón gana ahora más como presidenta de SEGIPSA que en su anterior puesto como una de las manos derechas de la ministra de Hacienda. Según la web de la propia empresa, la retribución anual de la presidenta es de 142.634 euros, mientras que los secretarios de Estado de Hacienda cobran unos 124.500 euros anuales, dependiendo del año, tal y como figura en el Portal de Transparencia.
En cambio, en Hacienda estaba en la primera línea. Por debajo de la ministra María Jesús Montero, en el Ministerio están, a la misma altura, la secretaria de Estado de Función Pública, Lidia Sánchez Milán; el secretario de Estado de Hacienda, ahora Jesús Gascón, y la secretaria de Estado de Presupuestos y Gastos, María José Gualda Romero.