Mientras Hillary Clinton, Jos Luis Martnez-Almeida o el Papa se quedan sin verificado, perfiles como el de Pablo Iglesias o Rita Maestre mantienen el check azul al ser suscriptores de Twitter Blue por casi diez euros al mes
No importa si has ganado un Oscar como Lady Gaga, has cofundado una de las empresas de software ms grandes del mundo como Bill Gates o incluso si eres el Papa; Elon Musk no ofrece concesiones ni misericordia. Si no pagas, no mereces la verificacin, el famoso check azul que se otorgaba por relevancia. A partir de este mismo jueves, si no pagas, tus mritos y seguidores dan igual, para la red social del pjaro azul eres insignificante. Ni siquiera el propio fundador de Twitter, Jack Dorsey, parece ser merecedor del verificado gratuito.
Han sido varios avisos ya, a finales de marzo miles de tuiteros dejaban sus ltimos mensajes antes de despedirse del verificado azul que les fue otorgado por relevancia en Twitter. Actores, periodistas, youtubers, personajes pblicos de todo tipo de perfiles. All quedaban sus mensajes pstumos como figuras notorias dentro de este ecosistema virtual. Sin embargo, horas despus todo quedaba en un susto y la tierra continuaba girando.
Sin embargo, esta tarde las aguas calmadas empezaron a agitarse, uno tras otro han ido cayendo famosos de aqu y de all, internacionales como Katty Perry, Justin Bieber, Halley Berry, Tom Cruise, Rey Mysterio, Jack Black, Eva Green, Hillary Clinton (de hecho, su marido no lo ha perdido gracias a estar suscrito a Twitter Blue) o Boris Johnson. Personalidades que pillen ms cerca, Ibai Llanos, Iker Casillas, David Bisbal, Sergio Ramos, Cristiano Ronaldo o Andrs Iniesta.
Tampoco Gerard Piqu ni su ex mujer Shakira. Penlope Cruz y Javier Bardem tambin han dejado de ser personas a destacar segn este nuevo movimiento de Elon Musk. Famosos patrios de generaciones ms jvenes tampoco se han salvado de esta criba. Se quedan fuera Aitana, David Bustamante, Chenoa, Beln Esteban, Mnica Naranjo, Jorge Javier Vzquez, Alex de la Iglesia, Kiko Matamoros o Terelu Campos.
El verificado de pago, adems de otros beneficios como la posibilidad de escribir tuits de 10.000 caracteres (4.000 fuera de EEUU) o poner negritas y cursivas, en menos de un mes ha pasado de costar ocho euros a subir hasta los 9,68 mensuales. Esta repentina y masiva criba de verificados gratuitos sigue la lnea de otros movimientos del magnate dueo de la red social, que parece estar a la caza y captura de suscriptores, ya que se estima que de forma global cuenta con solo 290.000 miembros de pago. Es decir, slo el 0,1% de los 250 millones de usuarios activos diarios que tiene Twitter paga la suscripcin.
Es cierto en el caso de muchos polticos, como Pedro Snchez, Yolanda Daz, Joe Biden o Volodmir Zelenski, cuentan con un verificado especial de color gris, en el que se especifica que esa “cuenta est verificada porque se trata de la cuenta de una organizacin gubernamental o multilateral”. La razn es que Twitter tambin cuenta con un formulario particular para organizaciones y empresas, que adems permite no slo tener este verificado sino contar con otros ms para las cuentas asociadas.
Aunque tambin es de pago, en concreto 950 euros al mes por la cuenta principal y 50 euros ms por cada cuenta afiliada. Adems, hay indicativos distintos, dorado para las empresas verificadas y gris para las gubernamentales.
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