Von der Leyen, que viajar la semana que viene a Pekn, marca un cambio en la filosofa europea renunciando a la inocencia, pero recalca que “Desvincularse de China no es una opcin” y las respuestas no pueden ser “blancas o negras”
La relacin entre Europa y China es demasiado importante como para ponerla en riesgo “al no establecer claramente los trminos de un compromiso saludable”. Es una potencia demogrfica, econmica, militar, una potencia nuclear y miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU. Tambin una violadora de derechos humanos que juega sucio presionando a los ms dbiles, pero est destinada a ser una de las superpotencias, o quizs la nica, que marque el rumbo del prximo siglo. Pero precisamente por eso, es ms importante que nunca plantar cara, fijar lmites y plantarse en las lneas rojas, porque luego puede ser demasiado tarde. Pero sin romper relaciones o forzar una ruptura “que no es viable, ni redunda en inters de Europa. Desvincularse de China no es una opcin, nuestras relaciones no son blancas o negras, y nuestra respuesta tampoco puede serlo”. se ha sido el mensaje que este jueves ha lanzado la presidenta de la Comisin Europea, Ursula von der Leyen, en uno de los discursos ms esperados, ms esperados y tambin ms aplaudido de los ltimos tiempos.
“China trata de cambiar el orden internacional: se est volviendo ms represiva en casa y ms asertiva en el exterior”, avisa la Comisin, y si la UE quiere tener un lugar en el tablero internacional debe moverse deprisa y no puede depender de EEUU. Estos das est en Pekn el presidente espaol, Pedro Snchez, en la primera visita europea al pas tras la reunin que Xi Jinping y Vladimir Putin mantuvieron en Mosc recientemente, y tras los esfuerzos diplomticos del pas para ofrecer un singular plan de paz (Josep Borrell dice con acierto que hace falta un enorme esfuerzo intelectual para considerarlo de verdad un plan para la paz) entre Rusia y Ucrania. La semana que viene viajarn all la propia Von der Leyen y el presidente francs, Emmanuel Macron. Y Bruselas quiere sentar las bases para que no haya errores.
“Von der Leyen ha pronunciado el discurso sobre China que Europa estaba esperando. Es una visin clara y slida de la relacin que reconoce que China ha cambiado y que la respuesta de Europa tambin debe hacerlo, con una estrategia de seguridad econmica en el centro”, apunta Noah Barkin, experto en China de Rhodium Group.
La UE cree que China ha cambiado y no hay marcha atrs. Su posicin se ha vuelto ms autoritaria internamente y cada vez ms agresiva y dominante fuera, desde Taiwn a frica pasando por las relaciones con Washington o amenazando y castigando a socios como Lituania. Encarcelando ciudadanos occidentales, espiando con poco disimulo, yendo cada da un poco ms all, forzando los lmites.
“Unas relaciones ms distantes y ms difciles”
El mensaje de Von der Leyen, despus de que China haya sido un tema secundario en la ltima dcada y de que los contactos previos hayan sido muy suaves, buscando desesperadamente no ofender ni enfadar a un actor que consideran tan vital como peligroso, es que eso ya no vale. “Est claro que nuestras relaciones se han vuelto ms distantes y ms difciles en los ltimos aos. Hemos visto un endurecimiento muy deliberado de la postura estratgica general de China”, ha dicho la alemana. “Y ahora se ha visto acompaado por un incremento de acciones cada vez ms asertivas. Hubo un claro recordatorio de eso la semana pasada en Mosc durante la visita de estado del presidente Xi. Lejos de desanimarse por la invasin atroz e ilegal de Ucrania, el presidente Xi mantiene su “amistad sin lmites” con Putin“, lament la presidenta.
Lo importante no es tanto la retrica como el mensaje. Bruselas parte de la base de que ha habido “un cambio de dinmica en la relacin entre China y Rusia. Est claro a partir de esta visita que China ve la debilidad de Putin como una forma de aumentar su influencia sobre Rusia. Y est claro que el equilibrio de poder en esa relacin, que durante la mayor parte del siglo pasado favoreci a Rusia, ahora se ha invertido”. Y eso tiene consecuencias monumentales para el orden internacional y el equilibrio de fuerzas.
No hay errores o improvisacin en las palabras de Von der Leyen, estn medidas al milmetro. Si China, como dice, “ha pasado pgina de la era de “reforma y apertura” y se est moviendo hacia una nueva era de seguridad y control” Europa debe responder. Sin aspavientos, sin buscar el choque, pero tampoco mirando para otro lado, enterrando la cabeza como un avestruz o poniendo la otra mejilla. “Podemos esperar que haya un esfuerzo para que China sea menos dependiente del mundo y el mundo ms dependiente de China, En su informe al reciente Congreso del Partido, el presidente Xi le dijo al pueblo chino que se preparara para la lucha (…) el objetivo claro del Partido Comunista Chino es un cambio sistmico del orden internacional con China en el centro”, avis Von der Leyen.
“Desvincularse no es una opcin”
Nada que no lleven lustros diciendo los analistas, y una posicin todava distante pero ms prxima a la de Washington, que pivot antes y se prepara para el choque en todos los niveles. Por ello la reaccin aqu debe cubrir todos os frentes. Reforzar el sistema basado en reglas, el libre mercado, la diplomacia y el trato de t a t. “Con todo esto en mente, nuestra respuesta debe comenzar trabajando para fortalecer el propio sistema internacional”, dijo Von der Leyen. “Necesitamos reforzar las instituciones y los sistemas en los que los pases pueden competir y cooperar y de los que se benefician. Por eso es de vital importancia que aseguremos la estabilidad diplomtica y la comunicacin abierta con China. Creo que no es viable, ni redunda en inters de Europa, desvincularse de China. Nuestras relaciones no son blancas o negras, y nuestra respuesta tampoco puede serlo. Es por eso que debemos centrarnos en reducir el riesgo, no en desvincularnos, y esta es parte de la razn por la que pronto visitar Beijing junto con el presidente Macron“.
Bruselas lleva una oferta de entendimiento, de cooperacin, de colaboracin, pero que debera ser en otros trminos. China no tiene mucho inters porque as le va bien. Nunca ha tenido prisa, el tiempo parece jugar a su favor, las corrientes demogrficas tambin. Sabe que Europa la necesita en las Relaciones Internacionales, en las comerciales, para la lucha contra el cambio climtico o ahora para intentar detener la guerra de Ucrania. Dir que s y que no, sonriendo pero sin comprometerse a nada, condenando la guerra pero sin buscar la paz, reclamando la integridad territorial pero reiterando su amistad con el agresor.
“Creo que debemos dejar espacio para una discusin sobre una asociacin ms ambiciosa y sobre cmo podemos hacer que la competencia sea ms justa y disciplinada. Y, en trminos ms generales, debemos pensar en cmo podemos trabajar juntos de manera productiva en el sistema global en el futuro y en qu desafos”, ha dicho Von der Leyen en su aplaudida intervencin. “Hay algunas islas de oportunidad en las que podemos construir”. La teora, la nueva teora, est bien, pero la prctica es mucho ms complicada.
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