La cascada de peticiones de particulares para comprar deuda ha provocado el colapso puntual de la página web del Tesoro Público español este jueves. El interés de los inversores minoristas en la compra de deuda pública española (sobre todo letras del Tesoro, pero también bonos y obligaciones), se ha disparado en los últimos meses ante el atractivo interés que ofrecen estos productos tras el alza de los tipos de interés que ha acometido el Banco Central Europeo (BCE).
El aluvión de peticiones de compra de deuda mediante la web del Tesoro, que en el mes de enero ha alcanzado los 400 millones de euros (en todo 2022 fue de 432 millones), ha provocado que el organismo haya tenido que parar su operativa durante una hora durante la pasada jornada y este jueves.
Fuentes del organismo han explicado a Efe que este paro se ha llevado a cabo porque el Tesoro debe enviar al Banco de España toda la información sobre las peticiones de compra que se hacen mediante su web, con el objetivo de que el organismo realice las comprobaciones correspondientes. Dado el gran volumen de información que el Tesoro tiene que remitir al Banco de España, «por seguridad» y con el objetivo de que esta información llegue correctamente, ha tenido que parar su servicio durante una hora. Desde hoy, el envío de información al Banco de España se realizará de madrugada, según las mismas fuentes.
Según han asegurado fuentes del Tesoro a EFE, el parón no ha impedido que las solicitudes hayan entrado correctamente para una subasta con pujas no competitivas (no ponen un precio específico para las letras o bonos, solo la cantidad que quieren) que son adjudicadas al precio medio ponderado.
La compra de deuda pública española se puede efectuar a través de tres canales: la web del Tesoro (gratuita), las sucursales bancarias (cobran comisión) y las del Banco de España (también gratuita).
La sede central del Banco de España en Madrid está viviendo en los últimos días una gran presencia de pequeños inversores que esperan grandes colas para comprar deuda pública española. Por ello, el Banco de España ha decidido que a partir del 7 de febrero será obligatorio pedir cita previa para el servicio de cuentas directas, que son cuentas de valores abiertas en el organismo para mantener los saldos de deuda del Estado.
El pasado mes de enero, el secretario general del Tesoro y Financiación Internacional, Carlos Cuerpo, ya aseguró que el organismo había observado un renovado interés por la compra de deuda por parte de particulares, instituciones financieras domésticas y los no residentes.
Los inversores minoristas pueden adquirir letras del Tesoro a distintos plazos (3,6,9 y 12 meses), así como bonos a dos, tres y cinco años y obligaciones con distintos vencimientos, aunque los más habituales suelen ser a diez, quince y treinta años. Actualmente, las letras del Tesoro a doce meses ofrecen una rentabilidad del 2,983 %, y las obligaciones a diez años, en el entorno del 3,306 %.