Precios justos. Así aseguró la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, que deberían llamarse los supermercados públicos que la candidata a la presidencia por la formación morada ha incluido en su programa electoral. El nombre no es nuevo, coincide con el programa que el gobierno argentino ha puesto en marcha para limitar los precios en uno de los países con mayor inflación del mundo, del 94,8% en 2022.
Fuentes cercanas a Belarra comentan a El Independiente que esta coincidencia ha sido eso, una coincidencia, y que no se trata de algo que hayan planeado con la intención de copiar el programa de la Casa Rosada. No obstante, ambas iniciativas persiguen que llenar la cesta básica de alimentos sea menos costoso para los ciudadanos.
Como publicó este periódico la propuesta de Belarra tiene todavía que resolver muchos interrogantes. No concreta ni quiénes serían los proveedores, ni cuáles serían los márgenes, ni los precios, ni dónde se ubicarían esos supermercados públicos. Hasta el momento, lo que recoge es que esta creación de supermercados públicos “haría, en términos coloquiales, que se les acabase el chollo, pudiendo ofrecer precios más bajos a las familias y condiciones laborales más dignas a los trabajadores y trabajadoras, así como mejores precios a los pequeños y medianos productores agrícolas y productores locales”.
Desde hace meses, la dirigente de Podemos ha cuestionado los márgenes de las cadenas de supermercados y ha atacado directamente al presidente de Mercadona, Juan Roig, al que llamó “capo” del “oligopolio alimentario”, y al que acusó de “especular con los alimentos”.
Según los últimos datos del índice de precios al consumo (IPC), los alimentos subieron de precio un 12,9% en el mes de abril, en comparación con el mismo mes del año pasado. Se trata de un incremento inferior al registrado en marzo, cuando los alimentos registraron una subida del 16,5%. No obstante, desde el Ejecutivo descartan aprobar más medidas ya que consideran que los datos de abril ya muestran una ralentización de la inflación y que las medidas aprobadas, como la reducción del IVA, están funcionando.
Así, el Ejecutivo ha descartado limitar los precios de los supermercados, a los que ha animado en alguna ocasión a elaborar una cesta de productos básicos, iniciativa que sí se ha puesto en marcha en alguna cadena.
Programa argentino
Precisamente de limitar las subidas de precio de los alimentos se trata el programa Precios Justos del gobierno argentino. Aprobado en noviembre del pasado año, estará en vigor hasta finales de junio y cuenta con el apoyo de 480 empresas.
Estas compañías se han comprometido a mantener las subidas de los precios mensuales por debajo del 3,2%. No solo incluye la alimentación, también el calzado, los teléfonos móviles, el material escolar o la industria textil forman parte de esta iniciativa. Cálculos del gobierno argentino estiman que el 86% de los bienes que consumen los argentinos están cubiertos por el programa.
«Es un programa que tiene como objetivo reducir la expectativa inflacionaria y tender a la estabilidad de los precios en el corto plazo, para recuperar el poder de compra de los ingresos de la población», reza la web del Gobierno donde se explica qué es Precios Justos. En esta misma página, se puede consultar cuáles son los productos incluidos y cuál debería ser su precio.
El gobierno argentino también ha puesto a disposición de los ciudadanos una aplicación en la que pueden comparar un precio de un producto en el supermercado con el acordado. Para ello, solo hay que escanear el código de barras y si el precio no coincide, el ciudadano puede denunciarlo.
Según la prensa argentina, el ejecutivo defiende que no se trata de una «congelación de precios», sino de un acuerdo entre empresas y la administración para garantizar que los ciudadanos pueden hacer frente a las compras básicas.