Fue hace más de dos décadas cuando se empezó a hablar del metaverso, algo que parecía sacado de ciencia ficción. Un mundo paralelo al de la vida real a través del ordenador. Desde los años 90 hasta nuestros días nos hemos encontrado, casi sin darnos cuenta, con avances interactivos significativos hasta llegar hasta el punto en el que nos encontramos. Google Maps, por ejemplo, nos permitió conocer cada rincón del mundo sin salir de una habitación.
Pero volvamos al metaverso. Ya hace años oímos hablar de Second Life, lo que sería casi la primera fase de este nuevo ecosistema. Aquella tecnología, desarrollada por Linden Lab, donde los usuarios pueden interactuar entre ellos mediante avatares y explorar juntos el mundo virtual, interactuar con otros residentes y participar en diversas actividades fue la primera piedra del metaverso.
El concepto de metaverso apareció por primera vez en 1992 de la mano del escritor estadounidense Neal Stephenson. En su novela Snow Crash describió una especie de espacio virtual colectivo compatible y convergente con la realidad. Para acceder a ese mundo eran necesarias unas gafas, disponibles en terminales privadas o públicas en el mundo real, que permitían aparecer como un avatar en el mundo virtual y otorgaban la capacidad de moverse en ese entorno.
Un metaverso, por tanto, sería un entorno en el que los seres humanos podrían interactuar tanto social como económicamente a través de avatares en el ciberespacio, el cual funciona como un reflejo del mundo real, pero sin las limitaciones físicas de este.
Durante muchas décadas ha pasado por momentos de desarrollo y de oscurantismo hasta que Mark Zuckerberg dijera que en la próxima década la verdadera revolución iba a ser la del metaverso. Tal fue su apuesta que cambió el nombre de la matriz de Facebook y la denominó Meta. La compañía ha invertido en el último año 10.000 millones de dólares y ha asignado 10.000 puestos de trabajo para alcanzar el que sin duda es el nuevo sueño del empresario estadounidense.
De aquellas palabras del CEO de la tecnológica ha pasado un año y el metaverso ha visto una explosión que solo ha hecho más que comenzar. Miles de empresas se han puesto manos a la obra y ya tienen su presencia en el metaverso. Es el caso de compañías como las operadoras de telecomunicaciones. Entre ellas, Telefónica.
Recientemente, la operadora celebró su propio metaverse day en la que anunció importantes novedades como la adquisición de empresas del sector del metaverso y alianzas estratégicas. La operadora, inicialmente, está aplicando la mayoría de estas funcionalidades del metaverso en actividades internas para la mejora de los servicios, si bien, el objetivo posterior pasa por la comercialización entre los clientes, que ya ha empezado de manera incipiente.
Indra, por ejemplo, a través de Misait, lanzó su oferta para el sector financiero en el metaverso, convirtiéndose en la primera compañía del sector que, no sólo pone a disposición de sus clientes un área de oferta virtual único y paralelo, sino que, además, habilita en él un espacio propio al que se puede acceder con un avatar y visitar sus estancias y propuestas, como si estuviéramos en el mundo real.
Hay más casos. Lanzadera, la incubadora de Juan Roig, tiene entre sus empresas escogidas a algunas que se dedican al desarrollo del metaverso. JPMorgan, uno de los mayores bancos del mundo, se convertía en la primera entidad de Wall Street en abrir operaciones en un mundo virtual. La compañía lanzó un salón en Decentraland donde ofrece servicios financieros.
El impacto económico del metaverso es toda una realidad.De acuerdo a un estudio realizado por McKinsey, en 2022 se han invertido ya 120 billones en poner pilares, conectividad e infraestructura tecnológica del metaverso. Y toda inversión tiene o debe tener un retorno:La consultora hacé cálculos y cree que, en 2030, ese ROI alcanzará 5 trillones de dólares.
De ocio a herramienta de trabajo
Pero, ¿para qué sirve realmente el metaverso? El metaverso está llamado a ser una de las herramientas de negocios más importantes en los próximos años y, como se mencionaba anteriormente, las empresas ya buscan su hueco dentro de él. Las posibilidades son infinitas. Desde organizar reuniones hasta poder celebrar conciertos o comprar tu propio hogar.
Justin Bieber se convirtió en 2021 en el primer cantante en dar un concierto en vivo en un espectáculo gratuito que fue seguido por millones de personas. Meta organizó tres conciertos en su metaverso Horizon Venues para despedir el 2021. El cartel estaba realmente bien: el rapero Young Thug actuó el 26 de diciembre mientras que el reconocido David Guetta y el The Chainsmokers dieron sus shows en Nochevieja.
Como se mencionaba anteriormente adquirir tu propia casa ya se puede conseguir en el metaverso. Madrid Argis Living ofrece la opción de acceder una réplica exacta en el mundo virtual de las casas que adquieran dentro de su macroproyecto de 708 unidades en San Sebastián de los Reyes. La empresa prevé invertir en la adquisición del suelo virtual y su desarrollo en viviendas para el cliente final. Según cálculos de la empresa el valor total de las casas reales es de 50 millones de euros. La fiebre es tal que en Estados Unidos ya se llegan a pagar 800.000 euros por parcelas para edificar.
La industria del videojuego también pisa el acelerador en el metaverso.Es el caso de Outer Ring,un videojuego de origen español. El proyecto, desarrollado por Windex Technologies en colaboración con Maniac Panda Games, estuvo desarrollándose más de tres años y se lanzó el pasado junio después de recaudar más de 14 millones de euros entre 70 fondos.
El Congreso de IA de El Independiente, en el metaverso
En plena expansión del metaverso, El Independiente se adentrará en el mundo virtual coincidiendo con el Congreso de Inteligencia Artificial del próximo 7 de noviembre, en la que se debatirá la importancia de la tecnología en la energía, en un momento crucial tras la guerra de Ucrania.
Los asistentes y los que sigan el evento a través de Internet podrán crearse su propio avatar e interactuar en las dos salas que se van a crear para que aquellas persona que lo deseen puedan adentrarse en el mundo del metaverso. Una de ellas será la sala principal, en el que los avatares podrán seguir en directo las diferentes mesas. En la otra empresas, partners, patrocinadores y asistentes se darán cita en otro recinto virtual para intercambiar impresiones.