Apenas ha durado tres meses en el puesto. Sergei Surovikin, llamado general Armagedón o el carnicero de Siria, fue nombrado como comandante general a cargo de las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa en Ucrania el pasado 8 de octubre. Por sorpresa el Ministerio ruso de Defensa ha anunciado este miércoles que será reemplazado por Valery Gerasimov, jefe del Estado Mayor. Es un golpe de timón inesperado, mientras se sigue librando una batalla feroz entre las tropas ucranianas y las rusas por el control de Bajmut.
En un comunicado, el Ministerio de Defensa ha señalado que el cambio responde al objetivo de «elevar el estatus de la cúpula y mejorar la calidad y la eficacia de la gestión de las fuerzas rusas». Surovikin será el número dos de Gerasimov.
Con experiencia al frente de las tropas rusas en Siria, Surovikin cuenta con el apoyo de Yevgueni Prigozhin, el fundador del Grupo Wagner, y con las simpatías del líder checheno, Ramzán Kadirov. Tanto Prigozhin como Kadirov han sido críticos con la línea del Ministerio de Defensa, encabezado por Serguei Shoigu, y con el jefe del Estado Mayor, Valery Gerasimov.
Prigozhin, que asegura que sus efectivos han logrado tomar Soledar, a 15 kilómetros de Bajmut, mientras que los ucranianos afirman que aún se lucha en esta localidad, conocida por sus minas de sal. La víspera a este giro en el alto mando militar Prigozhin presumía de tener más experiencia militar «de quienes llevan décadas al servicio del Ministerio de Defensa». Prigozhin también destacó la relevancia estratégica de Soledar, que si se confirma sería la primera victoria de Rusia en meses.
El objetivo final de los Wagner es Bajmut, que llegó a tener 70.000 habitantes. Lleva más de seis meses bajo el fuego de los combates.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que visitó la línea de frente en Bajmut en diciembre, respondía a Prigozhin: «Los combates continúan… Estamos haciendo todo lo posible por reforzar la defensa ucraniana sin parar un solo día». Zelenski aludía a las enormes pérdidas de efectivos y material de los rusos en el Donetsk.
Polonia, dispuesta a enviar Leopard 2
Todo indica que tanto la Federación Rusa como Ucrania se están reforzando con vistas a la primavera. Por un lado, el Kremlin prepara a decenas de miles de soldados, y a la vez el gobierno de Kiev sigue insistiendo en que marcará un punto de inflexión el envío de carros de combate Leopard 2.
El presidente polaco, Andrzej Duda, ha asegurado en Leópolis este miércoles que están dispuestos a entregar a Kiev una decena de Leopard 2 como parte de una coalición internacional.
Alemania ha dar su visto bueno a la reexportación de los Leopard 2 y hasta ahora ha sido reticente, pero la presión para que dé luz verde es ahora máxima. La ministra alemana de Exteriores, Annalena Baerbock, estuvo el martes en Járkov, donde se entrevistó con el jefe de la diplomacia Dmytro Kuleba, quien se mostró esperanzado ante nuevos envíos de armamento. En la coalición federal, los Verdes son los más firmes defensores del apoyo a Ucrania.